La comarca de Haro es la más noroccidental de La Rioja, lo que la convierte en frontera de la región con Burgos y Alava. Su capital, Haro, tiene una extensión de 40,32 km². Es el centro económico administrativo de todo el partido judicial, que engloba un todal de 49 municipios incluido Haro.
Su altitud sobre el nivel del mar (496,50 m. En la Plaza de la Paz) le proporcionan un clima cálido en verano y frío y con abundantes brumas en invierno. Está asentada en la vertiente meridional de los montes Obarenses, que culminan en los Riscos de Bilibio, a los que las Conchas de Haro separan de la sierra de Cantabria con la que forma unidad morfológica. A partir de aquí el relieve experimenta un rápido descenso, en dirección al Valle del Ebro.
El 2 de febrero, festividad de La Candelaria, se pasa a los recién nacidos bajo el manto de la Virgen de la Vega; Patrona de Haro para implorar su protección. El 15 de mayo, San Isidro, se oficia misa con ofrenda al santo. El 24 de junio, San Juan, se celebra una multitudinaria chocolatada al amanecer. Seguidamente, el Alcalde entrega la vara del mando al Regidor Síndico, que ejercerá estas funciones hasta finalizar las fiestas. A continuación, organizada por la Cofradía de San Felices, una tamborrada recorre la ciudad, leyéndose el pregón que anuncia las fiestas de Junio.
El día 25, está dedicado a San Felices, Patrón de Haro, santo anacoreta que fue maestro de San Millán, celebrándose una procesión en su honor. La cofradía de San Felices se fundó en 1655 y es la encargada de sacar, en la procesión, las arquetas que guardan las reliquias de este santo y de San Millán.
Pero la fiesta más famosa de la ciudad se celebra el día de San Pedro, 29 de junio, declarada de interés turístico, durante la cual, y en los riscos de Bilibio, se celebra la "Batalla del Vino", que ya menciona Hergueta en su libro editado en 1906, y que mantiene los mismos actos que a principios de siglo.
El Regidor Síndico abre la comitiva a caballo hasta llegar a la ermita que habitó los riscos en el siglo V, y, tras colocar el pendón de la ciudad en lo más alto de las peñas, comienza la misa a la que sigue la Batalla del Vino. Se trata de una batalla pacífica en la que los dos bandos, si durante la "lucha" consiguen saber a qué bando pertenecen, se lanzan vino sin descanso.
Todas las armas son válidas para esta incruenta batalla, botas e incluso sulfatadoras sirven para lanzar miles de litros de vino que transforman los riscos en un espectáculo impresionante. Después de la batalla, cuando se acerca el mediodía, la gente regresa a la ciudad para dar "vueltas" a la plaza de la Paz. Después corren las vaquillas en la plaza de toros.
El día de Santa Marta, la Hostelería celebra su fiesta.
El Primer Domingo de Septiembre, se celebra una romería a los Riscos de Bilibio. Los cofrades de San Felices van por la mañana, comen y regresan durante la tarde.
El 8 de septiembre se celebra la festividad de la patrona, La Virgen de la Vega, con un tradicional Rosario de Faroles, declaradas de Interés Turísitico de La Rioja. Tiene lugar un concurso de versos y piropos a la Virgen, ofrenda de flores y del primer mosto y bendición de espigas. Además de las celebraciones religiosas se desarrollan durante toda la semana verbenas, campeonatos deportivos, conciertos musicales y el tradicional desfile de carrozas. Finalizan con una jira campestre a la "Fuente del Moro".