Se trata de una intervención urgente, debido a la situación en la que se encuentra la infraestructura.
Se trata del depósito de agua potable, que se va a mejorar, y cuyos trabajos tienen un período máximo de ejecución de tres meses. Desde el ejecutivo local aseguran que “se trata de una obra de urgencia que va a permitir que el servicio se preste en las mejores condiciones posibles, pero sobre todo, que la infraestructura subsane las deficiencias detectadas”.
La actuación comenzará próximamente.