03 Noviembre 2017
El ejecutivo local va a realizar una modificación presupuestaria, en vista de la gran cantidad de solicitudes presentadas.
Laura Rivado y Javier Redondo han ofrecido, en las últimas horas, una rueda de prensa para mostrarse “muy satisfechos puesto que la medida que se adoptó en su día, ha dado resultados”. En este punto se ha recordado como en marzo de 2017 se modificó la ordenanza reguladora “para beneficiar la recuperación de este espacio, y sobre todo para que más proyectos pudieran acogerse a la partida”.
Desde el ejecutivo local explican que, en los últimos años, y principalmente en la pasada legislatura, “la mayor parte de la cuantía de estas ayudas quedaba desierta, y la cantidad global concedida no llegaba a los 3.000 euros”. Laura Rivado cree que esta circunstancia “se debía a las restricciones que se imponían en la propia ordenanza, de ahí que decidiésemos cambiarla”.
La modificación de la ordenanza ampliaba las obras subvencionadas, para lo que se incluía el arreglo de fachadas, medianeras y otros laterales de los edificios, además de otras cuestiones. La convocatoria se abrió, por tanto, a inmuebles con una antigüedad superior a los quince años y cuyo estado aconsejaba una intervención rehabilitadora. Los nuevos requisitos establecen que para poder beneficiarse de estos fondos los edificios deben reunir unas condiciones mínimas de habitabilidad.
Entre los cambios más significativos se pasó de un máximo de la ayuda concedida de 3.000 euros, a 6.000 euros. Otra de las modificaciones recoge la rebaja del límite mínimo de la obra. Hasta la fecha solo se podían acoger actuaciones con presupuestos mínimos de 4.500 euros, y ahora lo pueden hacer todos aquellos, a partir de los 2.000. El Ayuntamiento de Haro quiso así priorizar intervenciones en fachadas y tejados.
La ordenanza incluye subvenciones especiales para instalación de ascensores, eliminación de barreras arquitectónicas, instalación de aparatos de extracción o ventilación en viviendas o locales comerciales que no puedan ser objeto de otro tratamiento de rehabilitación y para obras de revitalización del tejido comercial. También han podido optar a las ayudas, los edificios de nueva construcción que sustituyen a inmuebles en ruinas.
Desde el ejecutivo local, dados a conocer los detalles y las modificaciones realizadas, han anunciado que “se tiene que realizar una modificación presupuestaria para pasar de 15.000 a 30.000 euros, en vista de la gran cantidad de solicitudes recibidas para acogerse a estas ayudas”.
Rivado destaca que “nos hemos quedado cortos, y las personas han respondido a los cambios, por lo que vamos a atender sus demandas”. La alcaldesa asevera que de esta manera se van a poder atender prácticamente todas las solicitudes recibidas.
Javier Redondo cree que “el Casco Histórico se puede proteger e impulsar de muchas maneras, y esta es una de ellas”. En este punto, el concejal de Obras recuerda que “este gobierno está muy concienciado con la recuperación de este espacio de la ciudad. Prueba de ello es la rehabilitación del Mercado Municipal, la construcción de un nuevo parking en la zona, entre otras muchas actuaciones”.
Desde el ejecutivo inciden en que la recuperación del Casco Histórico “no depende solo del Ayuntamiento, aunque la administración debe poner todas las herramientas a su alcance para lograrlo, como se ha hecho con esta modificación de la ordenanza, y aquí están los resultados”.